¿Cuál es la edad ideal para que mi hijo tenga un Teléfono Inteligente?
Mi hijo entra a la adolescencia y como todos los padres de
este tiempo mi esposa y yo nos hemos enfrentado a la pregunta ‘¿Cuándo podré
tener mi propio Smartphone?’. Parece ser que conforme se abarata el acceso a
esta tecnología los padres dan este tipo de dispositivos a sus hijos desde una
edad más temprana.
Por todos lados vemos chicos, aún de familias de recursos limitados, haciendo uso de teléfonos o tablets, pero el que sea un asunto común no lo convierte en algo conveniente ¿cierto?
Por todos lados vemos chicos, aún de familias de recursos limitados, haciendo uso de teléfonos o tablets, pero el que sea un asunto común no lo convierte en algo conveniente ¿cierto?
Soy un profesional en tecnología y como tal estoy consciente
de la cada vez más creciente necesidad de no ser un analfabeto digital, sé que
los profesionales no tienen futuro si no están familiarizados con el uso de la
tecnología. Entonces el asunto que debo dilucidar no es si mi hijo debe o no
tener un Smartphone sino cuándo estará preparado para tenerlo, así que me puse
a investigar y a meditar. Orando, consultando, leyendo y meditando
Lo que dicen los
estudiosos
Frank Rajan, un amigo de la India que trabaja como consultor
de RRHH para una enorme empresa de desarrollo tecnológico me envió un video
donde se expone un estudio cuya conclusión es que la experiencia al operar un
dispositivo móvil (ya sea con whatsapp, Facebook o con juegos) es
neurológicamente similar a la experiencia que tenemos cuando apostamos, es
decir el cuerpo humano segrega dopamina, y entonces esta actividad se vuelve
potencialmente adictiva. Eso explica por qué muchas personas no pueden estar
mucho tiempo sin verificar si en su teléfono hay nuevas notificaciones. El que
exponía en el video se alarmaba de la posibilidad de que un niño de 10 años o
menor reciba esas cantidades de dopamina en su sistema, algo que debe causar
cuidado entre los padres de niños pequeños.
Luego leí un artículo en el que se decía que el gobierno del
Reino Unido había encargado un estudio al respecto a un experto llamado Tom
Bennet quien condujo una investigación entre un número enorme de niños y adolescentes y concluyó que
es inseguro darles dispositivos a los chicos antes de los 16 años. Un estudio similar dirigido en España concluía
que aunque el 70% de los niños estaban teniendo su primer contacto con un Smartphone
antes de los 12 lo ideal era que no tuvieran uno hasta los 14. En un artículo de
un medio español se decía que los
propios reyes de España había prohibido a sus hijas las infantas el uso de
Tablets, televisión e internet de lunes a viernes, por considerarlas un
peligro.
Pero ¿por qué tanto escándalo?
¿Ayudará el Smartphone
a hacernos la vida más fácil?
Lo que se nos plantea como consumidores a la hora de
adquirir tecnología es que el adquirir un dispositivo nos hará la vida más
fácil y de cierta manera sí, un teléfono inteligente o una Tablet tiene el
potencial de ayudarnos a organizar nuestras vida, mantener la familia en
contacto y ser más eficientes en lo que hacemos, sin embargo normalmente si
usted conversa con un niño o un adolescente sobre el tema de los smartphones
verá que ellos tienen expectativas diferentes a las de sus padres respecto al
uso de estas maravillas tecnológicas.
Mientras el papá o la mamá que compran un celular a su hijo
lo hacen con el fin de tener un medio para comunicarse con él al momento de
recogerlo de clases o cuando estemos distanciados por algún motivo el muchacho
quiere el dispositivo primeramente para obtener aceptación y status entre su
grupo de amigos, vincularse con ellos mediante las redes sociales y , por supuesto,
jugar.
Al momento de evaluar debemos estar también consientes de
los riesgos latentes de un dispositivo de esta naturaleza. Un Smartphone es una
ventana al mundo, un mundo donde hay información que puede ser muy buena y
útil, pero también hay peligros muy grandes para un muchacho vulnerable, tales
como el ciberacoso, el sexting, la pornografía, las estafas en línea, etc. Por
supuesto que esos riesgos se minimizan cuando los padres establecemos correctamente
medidas de seguridad y límites
En resumen, un Smartphone tiene ventajas pero está lejos de
hacer el trabajo de ser padres más fácil, por el contrario hace que la tarea de
controlar y proteger a nuestros hijos.
Entonces ¿Cuál es la
edad ideal para que un muchacho tenga un dispositivo móvil?
Luego de orar, meditar y leer pienso que no se trata de un
asunto de edad cronológica sino más bien de madurez. Ahora bien ¿Cómo se si mi
hijo está lo suficientemente maduro para tener un dispositivo móvil? Para evaluar
este punto creo que sería útil plantearnos las siguientes preguntas:
- ¿Qué tan bueno es mi hijo para administrar su tiempo?
- ¿Tiene discernimiento para distinguir un contenido bueno de uno malo, una mentira de una verdad?
- ¿Voy a poder yo establecer los límites de lo que él tiene permitido hacer y revisar a menudo su celular?
- ¿Soy yo mismo un buen ejemplo respecto al uso responsable de mi smartphone?
Si las repuestas a estas preguntas son positivas quizá estemos preparados como familia para que nuestro hijo tenga un smartphone.
Reglas claras
Por supuesto que cada hogar es un mundo y que cada padre es
libre de establecer las reglas que cree que se ajustan más a su realidad, pero
el momento en que mi hijo tenga un celular de estos yo estableceré algunas que
pongo a continuación:
- · Horario limitado, no se permite usar el celular en horarios que son de estudio, compartimiento familiar como las comidas o que requieran una concentración especial
- · Lugares donde no se puede tener el celular. Básicamente no permitiré que los chicos lleven el celular a sus habitaciones o al baño.
- · El teléfono se apaga y se carga en el cuarto de los padres durante la noche.
- · Cero privacidad, por seguridad y por sentido común no debe haber restricciones de acceso de ningún tipo de los padres hacia los celulares de los hijos, sus contenidos, juegos y sobre todo a sus mensajes de texto y redes sociales.
- · El celular es un privilegio que puede revocarse en cualquier momento. Los hijos tienen obligaciones que de no cumplirse pueden derivar en la privación temporal o definitiva del celular, también es de esperarse que en época de exámenes o de una actividad de mucha concentración el celular sea retirado.
- Espero que este artículo ayude a algunos padres de niños y preadolescentes que pasan por lo mismo, me gustaría conocer sus opiniones y comentarios
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