¿Cómo disfrutar del sexo?

Extraído de ‘El marido cumpla con el deber conyugal’ por Juan Ramón Chávez

A. Trate bien a su esposa durante el día. Efesios 5:28-29, “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. 29 Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia” Los hombres son más fácilmente excitados por lo que ven. Por eso tienen éxito las revistas de mujeres desnudas. El Dr. Kevin Leman dice que: “mientras el hombre puede comenzar a excitarse en 4 o 3 segundos, pueden pasar 43 minutos antes de que la mujer este dispuesta a ser amada” (El amor comienza en la cocina. Dr. Kevin Leman).

La esposa es estimulada mayormente por el toque y las palabras románticas que por la vista. El Dr. Roberts Douglas dice: “Para la mujer, el amor es algo mas que emoción. Es trato. La mujer sabe que es amada por la manera que se la trata. La mujer se convence del amor de su esposo, no por la frecuencia de los viajes al dormitorio, sino por la manera en que se la trata entre esos viajes. Si el la trata con cariño, es posible que la mujer corra ella misma hacia la cama, en vez de ponerle obstáculos en el camino” Luego dice: “El hacer el amor no comienza después de acostarse por la noche. Comienza cuando usted se levanta por la mañana” (Para Adán con amor. Dr. Roberts

Douglas) Está hablando de la manera de tratar a la mujer durante el día. (Dar énfasis a esto)

B. No se apresure.

Leer Génesis 26:6-11

Aquí esta lo que podríamos llamar un “juego erótico” entre esposos. El rey llego a la conclusión, por la naturaleza de sus caricias, que no eran hermanos, sino esposos.

Porque solo entre esposos debe haber estas caricias. El marido inteligente sabe que su esposa necesita de tiempo.

C. Dense el uno al otro.

1 Corintios 7:3-5. El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido. 4 La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer. 5 No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia. Pablo pone al mismo nivel al hombre y a la mujer. Lo que necesita el hombre, también lo necesita la mujer. No se trata de demandar sino de suplir una necesidad. Se trata de pagar lo que se debe. (El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido) La relación sexual no se debe tenerse como satisfacción egoísta sino como una caridad entre esposos. No cabe el egoísmo en un matrimonio feliz. “Una de las razones por las cuales hay tantos conflictos entre los esposos, es porque se niegan el uno al otro en el deber conyugal. Cuando dos personas se unen en matrimonio, están entrando en un pacto solemne. Están haciendo entrega de sus cuerpos uno al otro. Ellos se están volviendo una sola carne. Negarse uno al otro es un pecado porque sume al compañero en el dolor, y puede conducirlo a buscar satisfacer su necesidad fuera del matrimonio, y si no lo hace por sus convicciones morales o religiosas, le puede llevar a enfermarse seriamente” (Com. A 1 Corintios Por Esther González)

“Crisóstomo lo expresa: de esta manera: "Por lo tanto, cuando ves que una ramera te tienta, di: "Mi cuerpo no es mío sino de mi esposa". Lo mismo también diga la mujer a los que quisieran manchar su castidad: "Mi cuerpo no es mío, sino de mi esposo" (Homilías xix. 2, 1 Cor. 7: 3)” (CBA) (La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer) Para no tener relaciones sexuales Pablo pone aquí tres condiciones:

1. ambos deben estar de acuerdo.

2. Debe ser por tiempo limitado.

3. ambos deben usar ese tiempo en la oración.

San Juan Crisóstomo (349?-407), doctor y padre de la Iglesia primitiva, nacido en

Antioquía, Siria (hoy Antakya, Turquía).

 

Conclusión

Hemos tratado de contestar tres preguntas lo más cercano a la Biblia posible. Pregustas como ¿Quién invento el sexo? ¿Cuál es el propósito del sexo? Y ¿Cómo disfrutar el sexo?

¿Está usted siendo el esposo amante que su esposa espera que sea? Si no le recomiendo que lea el mejor manual que tenemos en lo relacionado al sexo: La Biblia. Un libro muy antiguo pero con temas muy actuales. Estoy seguro que encontrara las respuestas a sus preguntas. Su matrimonio empezara a ser mejor cada día. Que Dios les bendiga y haga feliz a su esposa.