Brujos, santeros, creyentes católicos y evangélicos se reúnen en Cruzada en NY

Nueva York.- Miles de personas, entre ellos brujos, enfermos, santeros, creyentes, católicos y evangélicos se congregaron durante cinco noches consecutivas para adorar al Dios viviente y recibir simbólicamente las llaves del Reino. Todos recibieron a Jesús como su único Salvador durante el evento cristiano "Usa Tus Llaves", organizado por los pastores Salvador y Kenia Sabino de la iglesia Visión Celestial.

Incluso, un brujo que prefirió no dar su nombre, aceptó a Cristo y se comprometió en entregarse "por completo" en la difusión del Evangelio.

La actividad tuvo lugar en la iglesia central de Jerome y la calle 198 y Walton High School, en El Bronx, Nueva York, desde el viernes hasta el pasado martes. El cierre se realizó en el majestuoso Teatro United Palace, de la avenida Broadway y la calle 175, en el Alto Manhattan.

Allí, como aquel día de Pentecostés, se derramó el Espíritu Santo sanando a decenas de enfermos que recibieron el milagro de Dios simplemente por creer.

"Yo estaba tomando clases de Salsa y cuando termine, y pasaba por aquí, me di cuenta que algo se movía aquí adentro, por lo que decidí entrar, y ahora Dios me ha transformado", dijo Vargas, quien se desempeña como bailarín profesional.

Este reportero vió cuando el señor Germán Dávila lanzó su bastón al aire, y declaró "soy sano; este bastón lo echo al zafacón".

Mientras Germán ofrecía su testimonio, la señora Miguelina Díaz, confesó ser sanada por el Espíritu Santo.

"Cuando el pastor Sabino oró por mí sentí que algo me estaba quemando. Yo era una mujer enferma de artritis, no podía caminar y ahora estoy curada; camino normalmente sin dificultad. Ya no siento esos dolores fuertes en los huesos. Dios ha hecho el milagro en mi vida", agregó Díaz.

"Usa Tus Llaves", evento que se cerró con broche de oro el pasado martes, dentro del popular "Martes de Fuego", que regularmente realizan los pastores Sabino en el United Palace, sirvió de motivación y avivamiento para la gran iglesia cristiana de Nueva York.

Tanto así que el ex jugador de Grandes Ligas, nativo de San Pedro de Macorís, Víctor Horacio Nazario (Nicky Nazario) tuvo que acercarse al lugar para ver los milagros de Jesús.

"Puedo testificar que aquí mora Dios, que este gran evento ha sido transformador para mi y mi familia, porque las palabras de Dios son vida, nos motivan y nos dan fortaleza", dijo Nazario.

El sermón de este martes, dentro del mensaje en secuencia titulado "Usa Tus Llaves", estuvo a cargo del pastor y escritor Salvador Sabino. Mientras su esposa, la pastora Kenia Sabino, ofreció las palabras motivadoras de la siembra.

"La Iglesia no salva, el pastor no salva, las religiones no salvan; solamente Jesús salva", afirmó Sabino, en medio de una de sus predicas explosivas y contundentes ante la presencia de varios medios de comunicación y reporteros.

"Yo quiero darte las llaves de la Fe que vence al mundo, y esa llave se llama Jesús", sostuvo Sabino mientras miles de personas, creyentes e inconversos aplaudían y adoraban a Dios.

En su poderoso sermón el escritor, evangelista y pastor se refirió al Rey David, quien con apenas 17 años mató a Goliat.

Sabino relató que cuando los hermanos de David estaban en guerra, este fue a llevarle pan, y al ver el desafío que hacía Goliat a su pueblo, decidió enfrentarlo.

"Y quien es este filisteo que desafía los escuadrones del Dios viviente", se preguntó David.

"Tu vienes contra mí con espada y jabalina, más yo vengo contra tí en el nombre de Jehová de los Ejércitos", apuntó Sabino.

A la hora de enfrentar al filisteo (Goliat) David le gritó en la cara: "hoy te cortare la cabeza porque Jehová te entrega en mis manos".

Acto seguido, el pastor Sabino declaró ante la congregación que retumbaba en alabanzas que "el único enemigo que te mata es el que tu dejas vivo". En ese momento las voces de los cristianos, inconversos y católicos retumbaban en el Teatro United Palace, el cual parecía caerse.

Al final de su edificante e interesante mensaje, el pastor Salvador Sabino consideró que el único que pierde una batalla es el que trata, y el que trata puede ganar. "Hay que salir a guerrear", sostuvo en medio de fuertes movimientos al estilo de los "Cuáqueros".